jueves, 8 de marzo de 2007

España no existe sin Cataluña o Vascongadas

España no existe sin Cataluña, Vascongadas, u otras comunidades autónomas, al igual que Yugoslavia dejó de existir desde que se separó el primer trozo (pese a que el caso yugoslavo sea muy distinto). Cataluña no es España, dicen los nacionalistas. Ni Castilla tampoco, ignorantes. España es todo junto, y mientras no superemos la vergüenza del 98 y los nacionalismos oportunistas que empezaron a triunfar desde entonces, vamos listos. Nuestro potencial es mayor que el que estamos desarrollando, por ese lastre y la ausencia de auténtico y sano patriotismo.
Recientemente se reunieron Carod-Rovira, ejerciendo la labor de ministro de asuntos exteriores de Cataluña, y Moratinos, como homólogo del resto de España. Si dos ministros de asuntos exteriores se reunen, ¿no significa eso que son dos paises independientes? ¿No es así en todo el mundo? Y Zapatero sigue teniendo la cara dura de fingir que no están rompiendo España, mientras por otro lado Maragall reconoció que el Estado español ya es residual en Cataluña, para calmar las ansias de los nacionalistas. Esperemos que el tribunal constitucional sea capaz de arreglar el descosido a partir de ese "residuo" que aún mantiene viva a la nación.

Lo más molesto no es que pretendan romper España. Porque si la gran mayoría de los ciudadanos de cada región a separar lo decidieran así en libertad, estarían en su derecho. El problema es eso precisamente, que ahora no hay libertad de elección. En Vascongadas es obvio que no, por el terrorismo de ETA. Pero tampoco en Cataluña, por el adoctrinamiento nacionalista en las escuelas, basado en mentiras, y por la violencia callejera con que amedrentan a los disidentes las juventudes de los partidos nacional-socialistas (ERC, Batasuna en el caso vasco, y últimamente también sectores del Partido Socialista). Mientras no haya libertad de elección, cualquier intento de autodeterminación sería un fraude. Por eso previamente el estado de derecho debe acabar con los liberticidas, mediante el cumplimiento de una ley clara en este sentido que los persiga y encarcele.

Lo más molesto es que esa rotura de España pretenden hacerla imponiendo y con mentiras. Llamando España a sólo una parte de ella, como si no tuviera nada que ver con ellos. Nunca una fantasiosa nación "española" invadió a una "catalana", o "vasca". Ni siquiera cabe hablar de invasión cuando Fernando el Católico apoyó al bando navarro que estaba a favor de coronarlo a él rey (tenía derechos sanguíneos), en lugar de a su primo que era lo que quería el otro bando, sino de guerra civil entre navarros en la que el antiguo reino de aragón apoyó a uno de los bandos.
Curiosamente la región que sí fue invadida (realmente reconquistada, pues fue de los ancestros de los españoles) por España, Al-Andalus, es de las que tienen menos nacionalismo (lógico por otra parte, pues los actuales andaluces provienen mucho más de los españoles que de los andalusíes). ¿Por qué? Pues porque además del castellano no tienen ninguna otra lengua propia, que ha sido el truco principal con el que los nacionalismos que más han prosperado han engañado a la población, haciendo pasar algo que los distinguia del resto de los españoles, como algo que no era español. Falso de toda falsedad. A eso se le llama, además de timo, no querer convivir en pluralidad y diversidad, justo lo contrario que fingen esgrimir los progres.

Que no engañen a nadie. Que no sean tan reaccionarios pretendiendo que cualquier territorio gobernado desde Madrid se llame España, sea el que sea. No pasa nada por cambiarle el nombre a las cosas cuando éstas han cambiado. De hecho es lo que se hace en todo el mundo, como es lógico. Y si de España se separa Cataluña, por ejemplo, el resto ya no será España, se le llamará de otra manera.

Comprendo que los catalanes no quieran que la cultura castellana suplante a la suya en aquellos aspectos y poblaciones donde difieran, pero no existe ese peligro. Si acaso al revés, por culpa del gobierno autonómico pseudo-nazi del que adolecen.
En cuanto a los idiomas, hay que ser realistas y reconocer que aunque todos sean españoles por igual, sólo uno puede ser el oficial del estado. Y el castellano es el mayoritario, además de estar también extendido en las comunidades con otro idioma más, y en gran parte del extranjero. En el caso vasco, además, tan propio les es el castellano como el vascuence. Ellos no perdieron el idioma que tenían previo a las lenguas romances posteriores, a diferencia del resto de regiones, pero el castellano también estuvo presente allí desde sus principios.
Pero el hecho de que el castellano sea el idioma oficial de España, no va a provocar la desaparición del resto de idiomas españoles. No ha ocurrido tras más de cinco siglos de existencia de nuestra nación, y va a seguir sin ocurrir.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me da la risa. Yo que tú ni me atrevía a escribir gilipolleces de tal calibre en internet.


Saludos de una asturiana, que tampoco se siente española.

Mastieno dijo...

No, gilipolleces del calibre de la tuya no pienso escribir ni en papel.

A ver, ceporra, tú eres española. Indigna e ignorante, pero española. No me lloriquees con tus "sentimientos".

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con la asturiana, yo como catalana tampoco me siento española. Visca Catalunya lliure!! Visca el Barça!!

Mastieno dijo...

Ah... qué ingenuo era yo por aquellos entonces, pensar que España tenía arreglo. Lo cierto es que da asco, y en cierta medida porque vosotras sois españolas. Aunque también por los "otros", no os preocupéis.