lunes, 12 de febrero de 2007

Sobre la hipotética valía de ETA en el fin del franquismo

Los asesinados por ETA durante el franquismo fueron poquísimos comparados con los de la transición y democracia. Resulta paradójico que una vez conseguido lo que algunos iluminados socialistas dicen que dicha organización terrorista quería (acabar con el franquismo), estuvieran aún más encabronados.
El hecho es que en un régimen totalitario ETA no hubiera sido capaz de hacer nada. Nació a causa a la moderación del franquismo en los 60, y se fue creciendo conforme aumentaba la permisividad.

El motivo principal de la transición a la democracia fue la presión internacional, que hizo efecto tanto en el gobierno como en la población, que iba adquiriendo progresivamente las ideas globalmente imperantes en paises más poderosos. Además de que el largo tiempo transcurrido desde la guerra había disipado los temores a una hipotética dictadura socialista. Es previsible que la corriente reformista del franquismo nunca hubiera logrado imponerse sobre la corriente totalitaria si una banda terrorista como ETA hubiera logrado actuar profusamente en pleno régimen, pidiendo con ello a gritos la represión. Dadas las circunstancias, los terroristas sólo lo ponían más difícil.

Es posible, aunque muy dudoso, que se pueda adjudicar algún valor a parte de la ETA primigenia, pero no a la que quedó tras la transición, escisión de la parte más cerril, y heredera de una de las mitades de fanáticos que nos dejaron sin democracia durante 40 años (no es que nos la adelantaran, es que nos la quitaron).
Y en eso siguen, en volvérnosla a quitar, aliados con sectores totalitarios de la izquierda (Zapatero, Llamazares y compañía) y otros separatistas.

Batasuna-ETA-PNV representa básicamente al nazismo.

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